sábado, 23 de marzo de 2013

Alguna consideración

"Estoy en contra de estar en contra de los que están en contra de estar en contra". Hace unos días me levanté con esa frase dando vueltas en mi cabeza. Obviamente mi limitado intelecto tardo en conectar esa frase, que claramente llegaba en auxilio a eso que me venía perturbando, con una idea clara. Hace un tiempo escribí un ensayo exponiendo algunos de mis pensamientos e inquietudes. Curiosamente, fue de agrado o de desagrado para dos grupos muy distinguidos, aquellos no tan movilizados y los que más lo hacen.
Los chistes no se deben explicar, los ensayos tampoco. A no ser, claro, que se los haya expuesto de manera muy rudimental, que es lo mas común en mis escritos. Debo despojarme de toda filosofía barata y zapatos de goma para llegar más directamente a usted, lector, si acaso he fallado en anteriores oportunidades (y lo he hecho).
Mantengo mi postura de que no importa la bandera que llevás, si esta tapa tu visión, solo podés fracasar. El problema radica en lo que la lectura rápida genera de esto, la vaguedad. La solución no es no cargar ninguna bandera. Cosas como no deber atacar a mujeres, no consumir sexo pago, no consumir carne de cualquier ser vivo con sistema nervioso, o mas abarcativamente, la tolerancia, son obligatorias para poder llegar a un mundo mejor.
Cierto, es muy fácil criticar a los que no hicieron nada en la dictadura, o condenar o aceptar conductas siempre que pasen puertas afuera; pero mas fácil sigue siendo no hacer nada.
Que en mis escritos "ataque" más seguido a los que están en movimiento responde a la cercanía con la que me siento a ellos, a pesar de estar del otro lado del río. Pues si cruzarlo es un reto, volver a hacerlo representa uno mayor.
La vida son círculos, alejar y colocarse directamente enfrente de los estáticos es apenas la mitad del camino.
En otros escritos he pedido no ser considerado como un pesimista y creí haber conseguido demostrar el por qué no, pero lamentablemente parece que el mensaje que dejo es "no hagas nada" (bastante pesimista ¿no?). Lo que quiero hacerles llegar, mis palabras apuntan a que aquellos que están en movimiento consideren su trabajo como incompleto, como perfectible, y definitivamente, aquellos cómodos en su mundo, que comiencen ya a actuar.

martes, 19 de marzo de 2013

Calambres en el alma.

-Sé que me va a reventar las pelotas, sé cómo va a maniobrar y que me va a quemar los pelos, así que voy a serle directo.
-Adelante.
-Voy a contarle yo mis problemas y no esperar a que usted trate de descifrarlos de manera arrogante esperando que yo lo alabe por cosas que ya se pero valen más si salen de la boca de otros.
-¿Me permite hacerle una pregunta?
-No. Sé lo que me va a preguntar y la respuesta es por imposición. Recuerde, si sigue su método establecido como las telenovelas, para atraparme y así seguir viniendo sesión tras sesión le va a ir mal. Ahora se va a quedar quieto y me va a escuchar. Son varios los problemas que tengo, pero en esta oportunidad solo le diré algunos. Arranquemos con que todo me llega antes de estar preparado y definitivamente me tumba. También que me cuesta muchísimo mantener el equilibrio cuando las cosas andan bien. No sé si quedarme en el molde o actuar ferozmente. Y el peor de los problemas es que he llegado al punto de fastidiar a todos mis seres amados al punto del que ya no quieren oír mis penas.
-Lo que nos trae hasta aquí.
-Correcto.
-¿Qué tan consciente es usted de que soy parte de su mente?
-Lo suficiente como para poder tratarlo como lo vengo haciendo desde hace un rato.
-¿Quiere un consejo? Pues definitivamente este texto es para que alguien, en cualquier parte del mundo venga a su socorro.
-Bueno, dele.
-Váyase a leer un poco y vuelva recién cuando tenga una historia que valga la pena leer.
-Lo detesto.
-SE detesta.

viernes, 8 de marzo de 2013

¿Por qué flores y bombones sí?

Porque siguen golpeando y matando mujeres. Porque a pesar de que ahora sale mucho en los diarios, ésto no es algo que empezó hace dos o tres años, sólo está de moda hablar al respecto en estos días, pero la cosa viene ininterrumpidamente desde el origen de los tiempos.
Entonces ¿por qué flores y bombones sí? Por eso mismo, nada más.
Si se han tomado el tiempo de leerme lo sabrán de antemano, si no, les anticipo ahora, sueno pesimista. No veo en la historia de la sociedad (término que odio tanto y explicaré más adelante por qué) occidental nada más que un camino a nuestro fin y el de muchas otras especies vivientes. Por eso voy a ofender, y de no querer ser ofendidos, mejor dejen de leer ahora.
Soy de los que piensan que las personas saben cuál es la forma de obrar bien, pero no tienen ganas de hacerlo. Desde saber que no deben tirar papeles al piso, hasta saber que matar está mal. Y de los dos extremos que mencioné, ni ustedes ni yo estamos limpios. Y aún así, continuamos ejerciendo nuestro rol de humanos occidentales con total tranquilidad.
Soy de los que piensan que las ideas son fácilmente contaminadas por nuestras palabras y acciones. Y soy de los que piensan que todos mantenemos girando y girando a la rueda del odio.
Estos tres pensamientos pueden ayudar a entender un poco lo que les quiero decir. Es cierto que existen muchas personas que, por su cultura o su educación, no comprenden todos los aspectos del bien y el mal. Curioso es que no creo que existan muchas personas de la cultura occidental (mas un poco menos de la cultura oriental) que realmente lo conozca. Lejos de cualquier iluminismo y mas cerca de la contradicción que en cualquier otro día del año me encuentro ahora, exponiendo una teoría.
Previamente me referí al término "sociedad" con un grado de desprecio, pues suelo escucharlo constantemente cada vez que alguien quiere atacar su casa, pero negándose toda conexión con ella. Recuerden cada vez que han oído ese término en alguna conversación y les será muy fácil reconocer como la persona que lo dice, lo hace como si viniese del espacio, como si acaso fuese único entre los seres humanos y se encontrara libre de toda acusación. "En esta sociedad todos se matan, todos roban (menos yo)". "Esta sociedad es una mierda, nadie quiere progresar (menos yo)". Y pensar que solo es una palabra.
Las palabras son acciones, solo un tonto las negaría. Hablar es un acto, hablar es hacer, así que no traten de diferenciarlos. Por eso digo que las ideas, en su forma más platónica si se quiere, en alguna parte del recorrido, se contaminan, se pudren con nuestras palabras ¿Cómo los conceptos de compartir y de comunidad nos son tan hermosos y la palabra "comunismo" distancia a más de la mitad de las personas? Pues porque en algún momento, esa idea abstracta tan perfecta, pero tan débil (como todas las ideas), fue corrompida. Obviamente, Stalin tuvo mucho que ver al respecto, es cierto, pero no me quiero poner demasiado histórico en ese sentido.
En algún texto anterior consideraba necesario, por la naturaleza del hombre a no querer actuar correctamente, alguna fuerza dictatorial que obre por la paz, el amor y el entendimiento, pues, así como dejar de fumar es muy difícil por mas propaganda que muestre pulmones perforados, nuestra sociedad occidental está enviciada con muchos otros males que solo podría dejar de consumir a la fuerza. Es cierto, "dictadura" es mala palabra en nuestro país, pero creo que entendieron la diferencia entre mi dictador justo y noble y aquellos que hemos tenido nosotros. Aun así, como bien escribí en ese antiguo texto, sería un error que alguien nos obligue a ser justos, buenos y tolerantes. Ya se intentó -y lo acaban de leer-, el "comunismo" distancia a las personas por sus palabras más que por su idea.
¿Cuál es el problema? Bueno, acaban de leerlo, la imposición. Nos quejamos de los españoles que vinieron a "civilizarnos", cuando ellos sinceramente creían estar siguiendo un buen camino, y aun hoy seguimos tratando de imponer nuestro pensamiento sobre los demás. Veo constantemente fotos de compañeros vegetarianos atacando a aquellos que, además, consumen carne. Y ese "además" es fundamental, pues se los considera carnívoros, cuando en realidad son omnívoros. Y no es un error inocente, pues desde pequeños, viendo algún canal sobre el reino animal, nos ponemos del lado de la cebra, que corre por su vida, que del tigre que intenta devorarla, en un simple acto natural. Veo compañeros de distintas orientaciones sexuales hacer marchas donde incluyen a todos menos a mí, un impuro heterosexual. Marchas sobre el amor y la aceptación, las cuales no me excluyen directamente por no pertenecer a sus orientaciones, pero definitivamente no me invitan en su bandera. O veo compañeros feministas, que acusan a los hombres de ser seres trastornados que golpean porque sí. Y no, no es porque sí.
Dije antes, que todos hacemos girar la rueda del odio. No creo necesario defender la postura de que la energía se transforma. Desde pequeños, desde las burlas del jardín, vamos generando inseguridades en futuros hombres golpeadores y mujeres justificadoras de esos golpes. Cada insulto que hemos dado, cada ataque de soberbia, de instigación que hemos dado es parte de esa bofetada que esta recibiendo una mujer en este mismo instante. Gordos, enanos, pelados, pito cortos, tablas de planchar, ignorantes, buenos para nada, maricones, chetos, pobres y más. Todas palabras, que hacen que mujeres y hombres se sientan inseguros, débiles, atacados. Y la energía se transforma. Y el miedo no nos hace enfrentar al verdadero atacante. Y volvemos a casa, impotentes de la vida de mierda que tenemos y nos la desquitamos con nuestra mujer. Y estamos en casa, resignadas a no merecer nada mejor y nos aguantamos los golpes de nuestros maridos.
Esto lo he dicho en alguna oportunidad, en algún encuentro sobre violencia de genero y sé que cuesta horrores admitirlo, pues es mas fácil decir "la sociedad desde niños te obliga a menospreciar a las mujeres y sigue así, la sociedad, con la policía y las leyes denigrando a las mujeres". Y sí, es cierto eso, pero recuerden que nosotros somos parte de esa sociedad, sociedad que no va a cambiar mientras nosotros sigamos arruinando hermosas ideas, con mensajes horribles.
Entonces ¿por qué flores y bombones sí? Pues porque voy a dártelos y vos de un manotazo los vas a tirar al piso, y enojada me vas a decir que los hombres solo recordamos este día y luego volvemos a golpearlas como si nada, y yo voy a mirarte, a sonreírte  a agacharme para recoger lo caído y a volver a ofrecértelo  las veces que sea necesario. Pues todo mensaje, hasta los que llevan las mejores intenciones, se pierden en el odio, en el resentimiento. Y es cierto, yo todavía no tengo las herramientas para perdonar a torturadores y violadores, pero estoy intentándolo  Y es cierto, y se los advertí, el texto entero es una contradicción, pues acá estoy yo, intentando imponer una idea sobre cómo cambiar el mundo, siendo esa idea dejar de imponer por la fuerza generada por el odio y la resignación hacia los males de esta tierra.
Entonces ¿por qué flores y bombones sí? Porque no encuentro otra cosa mejor, pues porque si alguien me viene a atacar solo puedo darle un abrazo lo suficientemente fuerte como para que no pueda usar sus armas, pues mi muerte será necesaria, para evitar cometer el error de Platon, resentido por la muerte de su maestro, aquél que no trató de imponer ningún conocimiento. Será una prueba de que podemos dejar atrás todas nuestras ganas de demostrar nuestro nivel sobre otros seres "incivilizados", dejar de colonizar culturas subdesarrolladas y enfocarnos en seguir creciendo como individuos de amor, pues pienso que cambiar el mundo evolucionando individualmente es menos imposible que tratar de hacerlo, tratando de que todos alcancen el nivel que yo considero al día de la fecha como óptimo. Sé que no será tan fácil, ni definitivamente rápido, pero venimos como 6000 años usando un método que definitivamente no funciona y nos lleva a las guerras, podríamos tratar de copiar a las culturas que se enfocan en su paz y su armonía. Pues no significa ser egoístas y "salvarnos a nosotros mismos", sino todo lo contrario, pues parte de mejorar como persona conlleva ayudar a los demás. Quiero imaginarme que si algunas personas lo intentan y se empiezan a llenar de paz, despertará la curiosidad de otras, que preguntaran cómo se consiguió eso y solo así responder cuál ha sido el método y dejar ya de tratar de imponerlo.
Entonces, una vez más ¿por qué flores y bombones sí? Porque espero poder contagiar el amor.

Feliz día hermosuras, ojalá y solo ojalá, le encontremos la vuelta al amor.

domingo, 3 de marzo de 2013

Canción demoledora

Termino cortándose con unas cuerdas oxidadas
Desafió al cuento del por qué
Se enamoró y juró ser perdonada
Por algo que nunca fue

Y si lo ves
No tiene sentido explicarlo
Tu risa esta de mi lado
Solo el tiempo nos separa
Y si lo ves
Es porque esto esta pasando
Se están pegando los pedazos
Un buen tiempo nos depara
Es mi risa enamorada
Tu muralla derrumbada
Y mi pena
Y tu orgullo
Tus heridas
Ya soy tuyo

No
hay
nada
en
el
mundo
que
haga
que
piense
que
esto
puede
salir
mal.